Cinco cartas de Antonin Artaud que explicitan la toma de posición radicalmente revolucionaria del autor ante el arte y la vida, y que pueden leerse como un manifiesto de singular importancia de uno de los artistas más decisivos del siglo XX.
Antonin Artaud (1896-1948) es un autor clave en la poesía y el teatro de vanguardia del siglo XX. Poeta y hombre de teatro, actuó también en numerosas películas en las décadas de 1920 y 1930, entre ellas «Juana de Arco» de Carl T. Dreyer y «Napoleón» de Abel Gance. Su aportación más importante al mundo del teatro fue su creación del «teatro de la crueldad», que ejercería una enorme influencia en muchos dramaturgos y poetas posteriores. Artaud colaboró desde sus inicios con el movimiento surrealista de André Breton, el cual reconoció la «profunda influencia» de Artaud en el movimiento, aunque las relaciones entre ambos siempre fueron difíciles y ambiguas. Las cartas reunidas en este volumen son la respuesta de Artaud a la invitación que le hizo Breton de participar en la Exposición internacional del Surrealismo de 1947. Su negativa es rotunda, y los argumentos con que la sustenta muestran la radicalidad revolucionaria de la postura vital y artística de Artaud, que encarnó la rebelión total contra el orden establecido y llevó hasta últimas consecuencias.