En él vemos ya la conjugación de filosofía, filología e historia, metodología característica de sus obras posteriores, esta vez enfocada en resolver los enigmas que al investigador plantea la riqueza y variedad de pensamiento que Platón nos ofrece en sus obras, cuyas tendencias contradictorias son imposibles de desentrañar sin recurrir a la historia personal de este artífice de la filosofía política. El autor, deja claro que sólo entendiendo las fases sucesivas del desarrollo espiritual de Platón que, desde luego, están estrechamente vinculadas con su experiencia social, política y filosófica, es posible comprender los giros teóricos que van desde el idealismo optimista de la República hasta el frío realismo de las Leyes, transcurso que no refleja sino una inmensa decepción hacia la política y, en última instancia, hacia el hombre. En pocas páginas, el joven Colli realiza este vertiginoso recorrido, forjando un camino imprescindible para todo aquél interesado en el pensamiento político platónico y, a fin de cuentas, en la filosofía política misma, que aun en un período de desilusión, como el que vivió el último Platón, no debe dejar de proclamar «el principio inmortal de que el objetivo del hombre es el conocimiento y el conocimiento se alcanza en la comunidad y para la comunidad.»