ALVAREZ, IVAN DARIO / ALVAREZ, CESAR SANTIAGO
La obra comienza cuando Matías, el titiritero, quiere dar inicio a la función que todos los niños esperan, pero resulta que todos sus muñecos están profundamente dormidos, para despertarlos les pide ayuda a sus amiguitos, los niños, diciéndoles que se rían, que griten y pataleen si es necesario para despertar a sus títeres, pero son interrumpidos por una voz que llega de atrás del escenario; es Groucho, preguntando quien anda por ahí y al darse cuenta de que es hora de comenzar la función anima a su titiritero para que la comiencen. Así fue como todo los animalitos se la pasaron peleando y discutiendo por la propiedad del puente, hasta que un día el puente se levantó de donde estaba y diciendo a todos que estaba aburridísimo de la peleadera, él se iba a un sitio donde no pelearan tanto y que se construyeran un puente lo suficientemente grande para que unos pudieran cruzar y otros dormir. Así todos trabajaron día y noche para tener un puente más hermoso y grande que el anterior.