Una vez más viene el gran John Updike a entretenernos y hacernos pensar, como acostumbra, con su consabida destreza y su habitual sabiduría. Los años no parecen hacer mella en este escritor de sesenta y seis años, que ha recibido en su país todos los premios de mayor prestigio (el último de ellos la National Book Foundation Medal en 1998) y que ya es autor, con Hacia el final del tiempo, de casi cincuenta libros entre novelas, cuentos, obras de teatro, memorias, libros infantiles, poemarios y ensayos. ¡Por si fuera poco, publicó recientemente una antología de los que él considera los mejores cuentos del siglo! Para Tusquets Editores siempre ha sido y será un privilegio acogerle en nuestro catálogo. Corre el año 2020, Estados Unidos ha perdido una devastadora guerra con China, el dólar ha dejado de existir, los impuestos han sido suplantados por «dinero para protección» y la civilización tal como la entendemos se prepara, lentamente, para desaparecer. Pero nada de esto preocupa demasiado a Ben Turnbull, porque Ben tiene otros problemas que atender. Jubilado de sesenta y seis años, el atípico héroe de esta novela pasa sus días y sus noches intentando comprender a su exigente esposa, jugando al golf, visitando a sus cinco hijos, reflexionando sobre su salud en particular y la del universo en general. . ., y perdiéndose y encontrándose en varias realidades alternativas que lo llevan desde los tiempos de los apóstoles, pasando por el Egipto de los saqueadores de tumbas y los monasterios medievales, hasta alcanzar la iluminación definitiva a medida que se aproxima al fin de todas las cosas.