El dolor es un sentimiento secreto, es un animal imposible de avistar porque sólo existe en la persona que lo alberga; es un planeta oculto en nuestra galaxia. Sin embargo, en este libro y quizás sólo aquí podemos verlo, aunque no sea nuestro. En estas páginas, Andrea Bajani traza magistralmente el mapa emocional por donde se mueve el dolor; el cual no puede existir sin su dueño, un niño que descubre el mundo y la vida. Y mientras el dolor es una incógnita que crece hasta instalarse en el centro de esta historia, se despoja también de los juicios de valor que suelen rodearlo. Un bien al mundo traducido a cuatro manos por el Laboratorio Traduxit es una metáfora en eterna transformación, y nos recuerda que hay puertas que sólo pueden abrirse con la literatura.