Gail había leído en un libro que cuando una niña besaba a un sapo, éste se convertía en príncipe... y luego todos vivían muy felices, para siempre. Y ella deseaba con todas sus ganas vivir feliz para siempre.
Artículos relacionados
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información