MAUGHAM, W. SOMERSET
«El libro cumple la expectativa de ser lo que es: revelador. Esta pensado para mostrar los registros expresivos de un autor que en su día, ingenioso, brillante y caústico, fascinó a medio mundo [...] Vean cómo sigue seduciendo.»
Robert Saladrigas, La Vanguardia
«Una editorial exigente como Atalanta recupera "Lluvia y otros cuentos", confirmando la reubicación de William Somerset Maugham (1874-1965) entre los grandes escritores del siglo XX.»
Manuel Hidalgo, El Cultural
«Sus relatos son perfectos mecanismos narrativos compuestos por un observador irónico y agudo de los pecados y debilidades de la especie.»
Manuel Rodríguez Rivero, El País
«Cada relato entrona un argumento que sufre los reverses de una mente inmedible. Cada relato es un pasaje hacia una existencia que se revela compleja, que se rebela a la pluma, pero con la conciencia de depender precisamente de ella.»
Angelique Pierre, La disidencia ontológica (Argentina)
«Los relatos de este volumen expresan su visión del mundo: las convenciones se oponen a la vida, la máscara social oculta las auténticas pasiones. El matrimonio desemboca en el aburrimiento pero, en una sociedad hipócrita, el amor verdadero se considera algo indecente. En las relaciones humanas, la crueldad es inevitable. Aunque nos hagamos gordos, viejos y calvos, todos nos aferramos al amor.»
Andrés Amorós, Libertad Digital
«El gran telón de fondo de la obra entera de Maugham es la soledad. Sus personajes están abocados a vivir solos. Las uniones de las que habla en sus relatos son utilitarias, resignadas, carentes de amor aunque haya afecto. Generan dolores insaciables. Cuanto más grandes son las heridas, más poéticas y amargas se vuelve las escenas descritas, rayanas a veces en la ensoñación.»
Joaquín Torán, Ahora
«El diálogo, la descripción psicológica de los personajes, la síntesis narrativa para colocar lo imprescindible y que la historia quede redonda, a menudo con finales abiertos y que invitan a guardar en la memoria la complejidad humana de los personajes expuestos a grandes dilemas.»
Toni Montesinos, La Razón
«Ya era hora de que este extraordinario autor renazca en España [...] Los cuentos que aquí se reúnen, entre los más de cien que escribió, son piezas exquisitas psicológicas en las que el diálogo entre los personajes desempeña un papel muy importante.»
Luis Fernando Moreno Claros, Ciudad de Azófar
La dilatada carrera literaria de William Somerset Maugham estuvo colmada de triunfos, en las primeras décadas del siglo XX como autor teatral en Londres, donde llegó a tener hasta cuatro obras en cartel al mismo tiempo algo que ni siquiera Oscar Wilde logró nunca, y más tarde como novelista, con éxitos a escala mundial que hicieron que varios de sus libros fueran llevados al cine. Sin embargo, su verdadero talento cristaliza en sus cuentos, en los que a un amplio conocimiento de la vida mundana cosmopolita se unen sus enormes y minuciosas dotes de observación, salpicadas de aguda malevolencia.
Como advierte Vicente Molina Foix en el prólogo, el cuento era para Maugham la narración de un solo acontecimiento, material o psicológico, del que eliminaba todo cuanto no fuera esencial para su propia elucidación y unidad dramática. Heredero de Flaubert y, sobre todo, de Maupassant, se oponía frontalmente a la moda de la época, rendida al mandamiento chejoviano de no acabar los cuentos con un «final» que otorgase todo el sentido dramático al argumento. Prefería huir de los excesos verbales para permanecer fiel al desarrollo lógico del relato, que debía concluir «con un punto final antes que con puntos suspensivos». Lo importante era «narrar hechos» con la mayor naturalidad y lucidez.
Provenientes de épocas muy distintas y de muy variada extensión, los doce cuentos que integran este volumen son una perfecta muestra de su virtuosismo como narrador de historias.
William Somerset Maugham (1874-1965), nacido en la embajada inglesa de París, donde su padre trabajaba como asesor legal, vivió el período efervescente de Inglaterra anterior a la Primera Guerra Mundial durante la cual llevó a cabo una misión de espionaje en Rusia y los brillantes años veinte en Londres, París y Nueva York, siempre en contacto con las personalidades culturales más relevantes de su tiempo. En 1928 compró la villa La Mauresque, una finca de casi cinco hectáreas frente al mar, cerca de Saint-Jean-Cap-Ferrat, en la Riviera francesa, y allí solía pasar largas estancias que intercalaba con frecuentes viajes a América o a lugares remotos de Asia, a bordo de alguno de los transatlánticos de la célebre naviera inglesa P. & O.
Maugham estudió medicina en el hospital Saint Thomas de Londres. El éxito inesperado de una de sus primeras novelas afianzó su vocación literaria. A partir de entonces, el ejercicio de las letras y el teatro le hizo rico y popular. Escribió veintiuna novelas y veinticuatro obras teatrales, varias biografías, ensayos y libros de viajes, así como alrededor de cien cuentos.