Poema extenso, cuyo centro temático y sentimental se sitúa en Londres, por el que, sin solución de continuidad, van y vienen, revolviéndose sobre sus propios pasos, recuerdos, ideas e imágenes hasta conformar un vertiginoso laberinto verbal de espejismos y ecos mediante incesantes aliteraciones, paranomasias, paradojas, rimas inesperadas, citas y alusiones textuales, con los que el lenguaje, como radical cuestionamiento de la experiencia vivida, crea y descrea de continuo lo nombrado.