La senda del mal es una novela de poderosas vivencias de amor, dolor y muerte sobre las que planea el sentido del pecado y de la culpa, y la conciencia de una inevitable fatalidad. El protagonista es Pietro, que se siente atraído por Maria, la hermosa y arrogante hija de su patrón, Nicola Noina, que, sin embargo, no da señales de fijarse en el joven. Ante la indiferencia de Maria, Pietro corteja a Sabina, la sobrina pobre de los Noina, y Maria se pone inesperadamente celosa. Pietro, que no creía poder aspirar a tanto, logra conquistarla y para pedirle la mano le promete que se hará rico. Mientras Pietro se va del pueblo en busca de fortuna, Francesco Rosana, un rico terrateniente, pide la mano de Maria. Al mismo tiempo, Pietro es arrestado y detenido durante tres meses bajo la falsa acusación de robo de ganado. En prisión entabla amistad con el ladrón Antine, quien, cuando Pietro se entera del compromiso de Maria, lo convence de conseguir lo que quiere siguiendo «la senda del mal». Maria y Francesco se casan, pero durante la luna de miel, Francesco es asesinado. Maria, después de cinco años de luto, acaba casándose con Pietro, que mientras tanto, aunque con malas artes, se ha convertido en un próspero comerciante de ganado. Todo parece ir bien hasta que Sabina, que se casó y se mudó, le escribe una carta a Maria en la que le cuenta los hechos tal como sucedieron e indica a Pietro y a su amigo Antine como los responsables. Maria se encuentra en la situación de tener que elegir entre obtener justicia para un esposo al que nunca amó realmente y acusar a su actual marido, enfrentándose así al escándalo, o callar y seguir «la senda del mal».