Después de engendrar al último de sus tres hijos, un anciano muere sobre el cuerpo de una joven dando comienzo a una estirpe trágica y maravillosa. Un siglo de vida en El Salvador desde la visión de Magdalena, que se extingue en una habitación en la que recuerda sucesos mágicos como la historia del niño que caminaría sobre las aguas de un río, la maldición de una joven cuyos deseos malignos se cumplían, el regreso de un muchacho que trabajaba en la construcción del Canal de Panamá para conocer al amor de su vida, el destino imposible de una mujer sin líneas en las manos o los primeros asesinatos de una guerra que desembocaría en la angustia rutinaria del país más violento del mundo. Un relato de verdadero amor atravesado por la desgracia.
«La escritura de Jorge Galán, sabia, limpia y tersa, revela toda la potencia de una gran historia en esta novela sorprendente, conmovedora, que instalará para siempre en la memoria del lector la frágil y poderosa voz de una mujer salvadoreña llamada Magdalena».
Almudena Grandes