MORTON, TIMOTHY
Timothy Morton acuñó el término hiperobjeto para referirse a las cosas que se distribuyen masivamente en tiempo y espacio en relación con los humanos. Un agujero negro, un campo petrolero, la biosfera o el sistema solar, todos los materiales nucleares de la Tierra... son hiperobjetos. Un hiperobjeto podría ser un producto de manufactura humana de larga duración, como el poliestireno, o también la suma de toda la maquinaria chirriante del capitalismo. Los hiperobjetos son hiper en relación con alguna otra entidad, más allá de que esté producida o no por los seres humanos. Tienen muchas características en común: son viscosos, no-locales, involucran una temporalidad radicalmente distinta de las temporalidades a escala humana a las que estamos acostumbrados. Ocupan una fase espacial de alta dimensionalidad que los vuelve invisibles a los humanos durante ciertos períodos de tiempo. Los hiperobjetos ya han tenido un impacto significativo en el espacio humano psíquico y social. Son directamente responsables de lo que Morton llama El fin del mundo, volviendo obsoletas tanto la mirada apocalíptica sobre la crisis ambiental, como su negación.