POTDEVIN, PHILIP
1920. La raza colombiana está degenerada, dictamina la ciencia nacional. La solución es blanquearla. Isidoro Amorocho, provinciano, deforme y brillante demuestra el error y de paso descubre algo sorprendente: quién ordenó el asesinato del líder liberal Rafael Uribe Uribe. Una novela reveladora que pone fin a 100 años de impunidad y descubre el secreto mejor guardado de la historia colombiana.
Desde antes de su lanzamiento, la novela generó discusiones entre críticos, historiadores y expertos del siglo XX nacional. La novela transcurre en la Bogotá de 1914-1920 y cubre dos hechos que sacudieron el país durante los primeros decenios del siglo. En primer lugar, el cruel atentado del que fue víctima el general liberal Rafael Uribe Uribe, asesinado a hachazos cuando llegaba al capitolio nacional por dos sicarios y, en segundo lugar, el singular debate que se dio entre dos facciones de la intelectualidad científica nacional en torno a una discutible tesis de que la raza colombiana estaba degenerada y requería de inmediato una reparación para poder blanquearla a través de una inmigración masiva de europeos.
La novela devela, página a página, lo que se ha denominado el secreto mejor guardado de la historia nacional: el autor intelectual del complot y asesinato del líder liberal Uribe Uribe, quien se había constituido en una seria amenaza para la hegemonía conservadora y católica que detentaba el poder desde los tiempos de la Regeneración de Rafael Núñez. La manida tesis de los dos carpinteros, Galarza y Carvajal, que obraron supuestamente en solitario es refutada en la novela e incluso esta va más allá de las atrevidas hipótesis que señalan a una comunidad religiosa como la gestora del complot. La verdad que desnuda la novela es tan impresionante que obligará a los libros de historia a ser reescritos para dar cabida a lo que se ha querido silenciar durante cien años.
La novela se lanza con ocasión de conmemorarse el centenario del asesinato de Uribe Uribe ocurrido el 15 de octubre de 1914.
De igual forma, la obra recrea el debate sobre la raza mediante un minucioso trabajo investigativo de las fuentes primarias del debate. En ambas líneas narrativas, cuidadosamente documentadas con la rigurosidad del oficiante de la disciplina histórica, se intercalan personajes como el anarquista Nicanor Sastre, el utopista Indalecio Estibañez y el intelectual Isidoro Amorocho, que el lector termina dudando si son sacados de la historia o son fruto de la imaginación narrativa. A la par, allí están los conocidos Luis López de Mesa, Germán Arciniegas, Miguel Jiménez López, Lucas Caballero, León de Greiff poblando las páginas de la novela que pone en su lugar a las múltiples hipótesis sobre el debate racial y el primer magnicidio del siglo veinte.
La novela transcurre en los años en que Colombia goza uno de los periodos de paz más extensos de su historia. El país quiere entrar en la Modernidad y todo está dispuesto para ello. La inminente indemnización por la pérdida de Panamá promete grandes posibilidades, pero la nación comienza a ser sacudida por los sindicatos, los anarquistas, las sociedades utópicas, las sectas protestantes y los francmasones, estos últimos siempre presentes en los momentos claves de la historia.
Cuando la incipiente comunidad científica desata la tormenta entre la intelectualidad capitalina al postular la atrevida tesis de la raza colombiana degenerada aparece Isidoro Amorocho, un increíble personaje, que reafirma y a la vez desmiente, con su extraño cuerpo y su brillo mental, lo que está en juego en el debate: la búsqueda de una identidad nacional en torno al concepto de colombianidad. Amorocho es, a todas luces, la figura más ignorada de la historia intelectual del país. Un país que se jacta de tener la Atenas sudamericana y que a la vez ha sido consagrado al Sagrado Corazón por el verdadero monarca que reina por encima de presidentes, partidos y gobiernos de turno.
Isidoro descubrirá, de la mano de un oscuro anarquista de la época, el secreto mejor guardado de la turbulenta historia nacional: el autor intelectual del mayor magnicidio que se ha cometido desde la Independencia, el asesinato del general liberal Rafael Uribe Uribe.
Amorocho en realidad sólo pretende debatir, con quien se le quiera enfrentar, las 900 tesis del saber universal que él alega dominar. Lo conseguirá a un precio inesperado al verse envuelto... en esta borrasca formidable.