ANÓNIMO
Uno de los tres textos fundamentales de la filosofía del yoga
La cuarta y última parte del Yoga Supremo
acompañada del apéndice Asi habló Vasistha.
Uno obtiene lo que merece y cuando lo merece.
Yo no soy, ni hay otro, ni tú, ni estos existen; no hay ni mente ni sentidos. Solamente es una, la pura conciencia. Nada en los tres mundos jamás nace o muere. Sólo existe la infinita conciencia. No hay ni unidad, ni diversidad, ni confusión ni ilusión. Nada perece y nada florece. Todo, hasta la energía que se manifiesta como deseo y como ausencia de deseo, es tu propio ser.