KRAUZE, LEÓN
Eluan ha estado en las alturas del Monte Nasar por demasiadas lunas. El Mar de los Dangralos, de agua oscura como tinta, golpea amenazante la montana. Eluan teme volar; no confia en sus alas. Pronto tendra que enfrentarse al destino de todos los hombres alados que nacen en el rio Berintao y anidan en el Nasar: morir entre las fauces dentadas de los grandes y misteriosos peces de los Drangalos o volar hasta conocer Pantia, el extrano mundo de los sabios de Bakoria y los gigantes jorobados de Dascumo.