VITTORINI, ELIO
El Simplón guiña un ojo al Fréjus fue la obra favorita de su autor y hay algo en ella que recuerda a Conversación en Sicilia. La acción se sitúa en un suburbio de Milán en la inmediata posguerra, y transcurre alrededor de la vida cotidiana de una familia obrera que vive en todo su rigor las dificultades propias de la posguerra. La pobreza es uno de los protagonistas de la novela, una pobreza material que aquí encierra muchas cosas y que aparece revestida de toda su dignidad, magistralmente sugerida por el autor. El título hace referencia al abuelo de la familia, un personaje fascinante, espectador callado de los diálogos que ocupan la mayor parte del libro: un obrero jubilado que participó en grandes obras públicas, como las perforaciones de los túneles alpinos del Simplón y el Fréjus