KOHR, LEOPOLD
Lo que es cierto para los hombres que viven en prisiones sobrepobladas también lo es para los hombres que viven en las enormes instalaciones de aquellas modernas naciones, cuya innegable dimensión se ha convertido en la causa de las presentes dificultades. En consecuencia, justo como en el caso de los campos de prisioneros coreanos, la solución a los problemas que enfrenta el mundo, como un todo, no parece estar en la creación de unidades sociales más grandes ni en gobiernos aún más amplios, cuya formación es puesta en marcha por nuestros estadistas con un fanatismo sin creatividad, sino en la eliminación de aquellos organismos hiperdesarrollados que conocemos con el nombre de grandes potencias y en la restauración de un sistema saludable de pequeños y manejables Estados, que caracterizaron las épocas de antaño.