MARCHAMALO GARCÍA, JESÚS
«Hay una foto suya con Marilyn Monroe tomada en Nueva York en febrero de 1959. Marilyn esplendorosa, inmensamente rubia, con un elegante, carnal, vestido negro escotado como un escaparate y una estola de piel sobre los hombros. La baronesa, sentada a su lado sobre un descalzador, minúscula, los ojos negros, vivos, perfilados de khol y una sonrisa exánime».