Contemplar el océano es un libro de momentos. Un enamoramiento adolescente, el verano en un pueblo rural. El descubrimiento de la new wave, los primeros quiebres en los lazos amistosos y amorosos. El miedo como fuerza motriz, la rutina como amparo que linda con el tedio. El pudor ante el envejecimiento y la reconciliación con el niño que uno ha sido. Una trayectoria que va y vuelve, un relato fragmentario que, sin asumirse como autobiografía, plantea el problema de la ficcionalización de los recuerdos, la necesidad de reescribir el pasado para vivir el presente. ¿Qué es la memoria, parece decirse Dominique Ané, si no una forma de enfrentar nuestros fantasmas?
Segunda obra de ficción de este «gigante de la canción europea contemporánea» más conocido como Dominique A, autor de «uno de los discos franceses más importantes de los últimos treinta años: el que cambió todo, dio vuelta todo, revolucionó todo», en palabras de la revista francesa Les Inrockuptibles, Contemplar el océano es una demostración perfecta de la idea de que menos es más. Un libro preciso y precioso, donde cada palabra cuenta, y que recompensa con su poder de evocación a todo aquel lector conmovido por el paso del tiempo.