Este hermoso texto tiene como personaje principal a un bibliotecario, como medio el discurso y como tema el amor, aunque la intención de este particular personaje sea hablar sobre la lluvia. En palabras de Villoro: Conferencia sobre la lluvia surge de ese predicamento. Los devaneos de mi bibliotecario se inscriben en la larga estirpe literaria de la digresión, es decir, en el distraído arte de decir una cosa para hablar de otra.